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4 de octubre de 2008

Náufrago


Erase una vez un niño que estaba trabajando. No era por obligación, sino porque quería ayudar. Tuvo que cargar un montón de peso y bajarlo a una especie de salón de baile una planta mas abajo. Cuando terminó, se fue arriba para que en el salón sólo hubiera un trabajador (su compañero) y diese mejor imagen. Por lo tanto, se fue arriba y se sentó en las escaleras que darían al primer piso. Se quedo un buen rato allí sentado, sin hacer nada unas cuantas horas. Y de repente, se puso a llorar. Así de simple.

Os preguntareis porque lloraba. Lloraba porque estaba en una isla desierta, pero llena de gente. Lloraba porque aun estando con gente, se sentía solo. Y es el efecto de haberte encerrado en ti mismo muchos años. Se odiaba a si mismo, porque sabía que hacía mal. Pero no hacía nada... Simplemente se compadecía de si mismo y lo transmitía a su isla llorando. Se preguntaba ¿quién eres?, ¿porqué existes?, ¿realmente existes o eres un producto de ti mismo?, ¿as olvidado el recipiente de donde saliste, mentira? ¿porqué me ahogo yo solo, y los demás flotan? Es tan injusto...

Fue entonces, cuando un hombre ajeno al trabajo se le acercó al chaval y le pregunto: olle, ¿te pasa algo?, ¿estás mal?. El niño le contestó que estaba bien, mientras se secaba los ojos. El hombre sabía que no era cierto, y se dio media vuelta. Pero había cumplido su objetivo. El niño se dio cuenta que no estaba tan solo. Que podía hacer memoria, podía acordarse de quien era, y jugar con esa personalidad. Salir al mundo cual vampiro y simplemente.... vivir. Fue entonces, cuando sus ojos se desempañaron, y pudo ver una isla colindante. No se dejaba ver bien, la niebla era demasiado densa. Pero se propuso a si mismo disiparla. Y aunque fuera esporádicamente en un principio, se daría un voltio por aquellos parajes.

Esta historia es real, y no tiene parte fansatiosa. Pero resulta que aquel chaval no era ningún amigo mio. Ni siquiera un conocido. Ese chaval, era yo.

Saludos. Ramón
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5 comentarios:

Unknown dijo...

Joder mon, que realidad más triste, espero que hayas ido ya a la isla esa que taba nublada xq como aún estes estancado en tu isla "desierta" es pa pegarte.
Tu compañero se supone que es tu hermano?, con que edad te ha pasado esto?.
Gracias por narrar tu cruda realidad, espero que haciéndolo hayas conseguido liberarte de algún mal trago, cuidate friend

Ale dijo...

Y cuando la niebla se disipe...conocerás el verdadero mundo...y el mundo conocerá al verdadero Ramón. Un abrazo!

(¯`·._.·[ℓα∂у#σвѕ¢υяу]·._.·´¯) dijo...

Wao...
oJala la niebla se haya diSipado ya,y hayaS viSto los paisajes de esa otra iSla ^^
pueS,,,cmo me haS deJao sin palabraS,,noSe Q máS decirte,,,bueno si,q sino se ha disipado todavia,seguro q entre todos te podemos comprar una maquina como la q tiene doraimon de Quitar nieBla ^^.
Chau Ramon,un beSo

Manolo dijo...

Tio, yo pase algo similar cuando me enamore de marina, creia que estaba solo, lo veia todo perdido...pero claro, creo que no se puede comparar. De todas formas, espero que esa niebla que hay en tu isla, se haya disipado ya..y si no es asi, te ayudare en todo lo posible, porque aunque aveces me notes distante y que no te hago mucho caso, sigo siendo tu amigo, y eso es algo que nunca cambiara.

Un abrazo

Jesús C. dijo...

tio, no sabes el coraje ke me da no aber podido leer todo lo que as escrito asta aora, y tb me da coraje que no pueda leerlo nunca porque NUNCA tengo tiempo
De todas formas, me alegro de que tu si hayas podido llevarlo, y si tngo algun hueco pos de vez en cuando me leere al menos el último ;)
1 abrazo

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